¿Qué tienen los naipes que los hace tan populares?
En la actualidad nos encontramos inmersos en una era de plena expansión digital. Todos estamos hiperconectados, vivimos pegados a nuestros smartphones, ordenadores y tablets, y nos entretenemos con videojuegos que cada vez cuentan con una tecnología más innovadora.
No obstante, a pesar de este crecimiento tecnológico, hay ciertas cosas que nunca han dejado de estar presentes en nuestras vidas y en nuestras casas, y que forman parte de nuestra cultura y tradición. Estas son las barajas de cartas, con las que hemos jugado infinidad de veces desde que tenemos memoria y con las que hemos pasado y seguimos pasando tantos buenos momentos. Incluso hoy en día, prácticamente no hay un solo hogar que no tenga una baraja de cartas.
Muchos juegos que no han abrazado la digitalización han ido decayendo con el tiempo hasta desaparecer, pero los juegos de naipes, sin embargo, continúan entreteniendo a las familias como el primer día. ¿Cómo es posible que algo tan sencillo como un juego de cartas siga entreteniendo a amigos y familias generación tras generación?
La clave está en la conexión personal y las relaciones.
Si algo tienen los naipes, es que son capaces de unir alrededor de una mesa a distintas personas de diferentes generaciones y hacerles conectar entre sí y disfrutar por igual. De hecho, jugar a las cartas es una de las mejores maneras de las que las personas mayores consiguen jugar y conectar con sus nietos pequeños. ¿Quién no recuerda esos momentos de la infancia jugando con sus abuelos y abuelas?
Podemos adaptarlos al tiempo del que dispongamos, ya que dependiendo del juego podemos jugar una partida que dure toda la tarde, o simplemente echar varias partidas que acaben en menos de una hora.
Otro de los beneficios que presentan los juegos de cartas es que permiten desconectar durante un tiempo de los aparatos tecnológicos y todos los estímulos que recibimos a lo largo del día y que también afecta a los más pequeños de la casa, quienes cada vez más pasan el tiempo jugando con tablets y otros aparatos electrónicos.
Los juegos de cartas ayudan a las personas a desarrollar múltiples capacidades.
Los juegos de cartas tienen grandes beneficios sobre todo para los más pequeños, ya que desde edades muy tempranas les permite a los niños y niñas desarrollar distintas capacidades:
- Cooperación. Los niños y niñas aprenden a jugar en equipo y cooperar. A pesar de la rivalidad que existe en algunos juegos, muchos de los juegos de cartas suponen trabajar con un compañero en parejas, y es necesario que ambos estén conectados y colaboren para ganar.
- Respeto a las normas. En los juegos de cartas, los pequeños deben seguir ciertas reglas. Aprenden que “no todo vale” y que deben ceñirse a una normativa para ganar la partida.
- Socializar. Los más pequeños aprenden a socializar no solo con otros niños y niñas de su edad, sino también con personas de otras generaciones. Los juegos de cartas les ayudan a conectar y a entender a las personas más mayores y mejorar sus capacidades de socialización con cualquier persona.
- Primer contacto con las matemáticas básicas. Muchos juegos de cartas, por sencillos que sean, requieren de ciertos cálculos que se deben hacer de manera mental y rápida. Esto estimula la mente de los más pequeños y les ayuda a desarrollar sus capacidades cognitivas sin ni siquiera darse cuenta y por medio del juego.
- Desconexión de la tecnología. Los niños ya nacen abrazando las nuevas tecnologías y se pasan el día con aparatos electrónicos. Los juegos de cartas les suponen un rato de desconexión de las pantallas para conectar con las personas que les rodean.
- Concentración y memoria. Del mismo modo, los juegos de cartas son absorbentes. De esta manera exigen a los niños y niñas poner toda su concentración en el juego, y memorizar ciertos elementos, normas y dinámicas del juego para ganar la partida.
- Aprender a ganar y perder. Como en todos los juegos, a veces se gana y a veces se pierde. De esta forma, el niño o la niña aprende que tanto ganar como perder no importa, sino que lo importante es el “durante”, el momento en el que se disfruta jugando.
Generando grandes momentos.
Pero, sin duda, además de todos estos beneficios que aporta jugar a las cartas, el verdadero motivo por el cual los naipes siguen siendo uno de los juegos por excelencia. Y por ello perduran desde hace tantos años. Porque es capaz de unir a las personas y generar momentos e historias inolvidables alrededor de una simple mesa. Y donde no existe brecha generacional, ya que los adultos juegan los pequeños de igual a igual y disfrutan juntos.
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